Hace 46 años durante el gobierno de Salvador Allende, se votó de forma unánime en Congreso la nacionalización del cobre chileno. Durante la asesina dictadura pinochetista, se abrió el camino a la inversión extranjera, que en la actualidad se lleva más de las dos terceras partes del beneficio que produce la explotación de este recurso y quienes lo trabajan. Aún así lo que queda para el país constituye el 13% del PIB, y se le ha llamado “el sueldo de Chile”. Mientras la empresa estatal CODELCO es la mayor productora de cobre de mina del mundo, la mina a tajo abierto con la mayor producción cuprífera del mundo es Minera Escondida, controlada por BHP Billiton.