Esta mañana hemos visto una vez más el asesinato brutal de personas inocentes mientras llevaban a cabo su vida diaria. Los marxistas condenamos estos actos de terrorismo, de la misma manera que condenamos el asesinato de miles de personas en Siria y otros países en guerra. La cuestión es: ¿qué se puede hacer para poner fin a esta barbarie?
Mientras veía las noticias sobre el ataque con bomba en el aeropuerto de Bruselas y más tarde en el metro, me vino a la mente lo siguiente:
1) En primer lugar, y ante todo, nuestra solidaridad hacia las familias de las víctimas de los ataques terroristas en Bruselas. Estos ataques revelan que ninguna cantidad de seguridad (policía y militares) puede detener los ataques bárbaros y cobardes de esta mañana. A pesar de la presencia de tropas militares de élite en el aeropuerto desde noviembre del año pasado y de una mayor vigilancia policial en la entrada de los aeropuertos y el metro, éstos son imposibles de asegurar completamente. Un bloqueo generalizado, como el de esta mañana, paralizaría toda la ciudad y su economía. La ciudad dejaría de funcionar.
2) En tanto que la herida de Oriente Medio siga supurando, esto va a continuar. "Nuestros" gobiernos occidentales son responsables del desastre en Oriente Medio, creyendo que podían entrar en los países, derrocar sus regímenes, bombardearlos hasta reducirlos a pedazos, y que entonces todo volvería a la normalidad. Han tenido el efecto contrario. Y al no hacer nada para resolver la alienación de los inmigrantes y de la juventud de tercera y cuarta generación, nada para erradicar el racismo, el desempleo, la pobreza, etc, mientras que al mismo tiempo bombardean países de Oriente Medio, han creado un terreno fértil en el que los fundamentalistas pueden ir a pescar. Esto continuará.
3) Estos últimos ataques con bombas también serán utilizados para justificar leyes más represivas –en nombre de la lucha contra el terrorismo, por supuesto. La mitad de las 18 medidas antiterroristas anunciadas por el Gobierno belga después de los ataques de noviembre en París, amenazan a todos los ciudadanos, empezando por las organizaciones obreras y grupos progresistas. Esto ya fue denunciado por sindicatos importantes, grupos de abogados y magistrados. Schengen será sometido a más presión. Se incrementarán aún más las tensiones entre los estados miembros, que se sumará ya a la frágil situación de la Unión Europea, y también dentro de cada país.
4) Estos atentados serán utilizados para cubrir la barbarie perpetrada contra los refugiados en las fronteras griegas y otras. Con el fin de convertir en bárbaros a los refugiados, éstos deben ser equiparados con el crimen, la violencia contra las mujeres, y el desorden general. Una vez que la máquina de propaganda haya logrado eso, entonces todo tipo de prácticas bárbaras pueden justificarse. Las familias pueden ser abandonadas a la putrefacción en el barro, y morir por miles al huir de la guerra, que fue creada por "Europa" en primer lugar.
5) Los partidos de derecha en todas partes intentarán utilizar estos ataques en su beneficio. En tiempos de lucha de clases, como por ejemplo en Francia y Bélgica actualmente, este tipo de cosas son útiles para distraer la atención de las causas reales de la crisis que estamos viviendo. En todas partes hay tensiones de clase. La juventud, en particular, se está volviendo contra el sistema capitalista. No pasará mucho tiempo antes de que toda la clase obrera se mueva en el conjunto de Europa.
6) Los ataques también serán utilizados para justificar un mayor bombardeo de Siria, agravando la crisis de refugiados que ya era grave. Los refugiados siguen llegando y no se detendrán, en la medida que lo que una vez fue su hogar se ha convertido en un infierno. No tienen otra alternativa que seguir concentrándose en las fronteras de la UE.
7) Esta barbarie también está impactando en la conciencia de millones de trabajadores y jóvenes, en particular entre los últimos. Ellos ven un mundo sin futuro, el aumento del desempleo, ataques constantes a todos los logros del pasado, a la educación, la salud, la vivienda, el empleo digno, los salarios... combinado con guerras en todo el mundo.
8) No hay manera de resolver esto en tanto en cuanto lo que determine las políticas de todos los gobiernos sea maximizar los beneficios de unos pocos. El sistema no puede ser reparado ni alterado. Hay que desembarazarse de él.
9) Las muchas luchas de los trabajadores y de la juventud de todo el mundo por una vida mejor, por empleo, vivienda, salud... tienen que agruparse como una sola, y centrarse en una cosa: la erradicación de este sistema, de cuajo; y sentar las bases de una nueva sociedad, el socialismo. No es una utopía; es la única alternativa concreta a la barbarie actual.